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| foto web del Balmaseda |
Los ayaleses han parado la sangría de puntos y en La Baluga logró un importante punto y supo mantener su portería a cero. Los agobios en el tiempo de prolongación hacen bueno el punto cosechado por un equipo disciplinado y trabajador que recuperó sus señas de identidad.
El Amurrio supo controlar con intensidad y firmeza a su rival. Únicamente un remate intencionado en el arranque del incisivo Arandilla se puede computar como ocasión local. Un par de acercamientos más del Balmaseda fue todo lo que concedió el Amurrio.
Un Amurrio, que además de defender ,dispuso de dos remates de cabeza de Eguren y Julen Lafuente que pudieron desnivelar el tanteador antes del intermedio.
Tras una primera parte trabada, se animó el partido en la segunda. El choque se abrió y otra vez Arandilla acarició el gol con un zapatazo lejano. El reparto de puntos no estaba asegurado y los ayaleses empezaron a sufrir los minutos finales.
El equipo se pertrechó ante el asedio de los encartados y Eguren salvó un remate de Lambarri que se colaba. Maturana emergió para salvar un disparo de Borja y Delgado sacó bajo palos un remate de Retes para sellar un empate muy sufrido,pero con mucha personalidad y garra.
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